Instrucciones para matar a una madre nonagenaria

Basado en hechos reales...y dejando constancia de que yo también se insultar.  ¡Cretinos!

Secuencia de las últimas navidades de una madre en casa de su hijo.

PUNTO I
Como es preceptivo, la familia se reúne con los mejores deseos de felicidad, paz y amor. Al caer la tarde, después de una opípara comida y de abundante ingestión de alcohol, suficiente para desinhibirse de lo que se dice y de lo que se hace, se le canta, entre risas:

♫♫♫ si yo tuviera una escoba, si yo tuviera una escobaaaa ♫♫♫

¡Ruines!

PUNTO III
En el camino o se muere de pena, o se muere de miedo, o se muere de vergüenza recordando que ni el hijo, ni los nietos, ni nadie de su familia, han estado en condiciones de acompañarla de noche a su casa.

¡Malvados!
PUNTO II
Como da pereza salir en una noche tan fría para acompañar a la vieja a su casa, se la mete en un taxi.
El taxista gustoso la llevará, cobrando el importe del trayecto y por supuesto la tasa de festivo. Pero qué  importa, si la que paga es ella.

¡Perversos!


PUNTO IV
Después de este día, esperas un año, y si vive, la vuelves a invitar.
No hace falta verla hasta entonces. ¿Para qué?

¡Indignos!




PUNTO FINAL

Una madre que no falte, en tan acogedora familia, aunque sea de florero.

¡Manda cojones!
¡Mezquinos!



Por eso es mejor que cada rata se meta en su madriguera.
¡Desgraciados!





Entrada destacada

Abre tu puerta niña que ya no hay miedo. Recitado

RECITADO:  Texto de Anna Jorba Ricart. Abre tu puerta niña- Voz de Anna Jorba Ricart Puedes escuc...

AQUÍ PUEDES VER TODAS LAS ENTRADAS POR TÍTULO