Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como PLAGIO DE UN CHISTE

Plagio del chiste del avión

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste. Del primer viaje que hice en avión no tengo recuerdo, fue atravesando el continente africano desde Guinea a Madrid. Iba en canastilla porque era niña de pecho, bueno, de Pelargón que era la leche artificial con la que mi madre me criaba. Salvo en una experiencia nefasta en que casi muero de terror  porque con las turbulencias daba golpes de cabeza con el techo del aparato, por regla general me gusta viajar en avión. Las ventajas son muchas. La rapidez.  Aunque también utilizo el AVE, que vuela, pero no se eleva. Y me gustan los aviones. Desde los Boeing, pasando por el supersónico Concorde con el que llegué a viajar; los Airbus o el Victa Aircruiser de la última vez que fui a Australia ¡una pasada¡   y ha...

Anécdotas del currelo. Plagio del chiste de los gitanos

La  SERIE PLAGIO DE UN CHISTE  en este blog es una  sección dedicada a  microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Ejido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste ANÉCDOTAS DEL CURRELO De pequeña, jugando con mis primos, tiré una piedra que fue a impactar a la chola de Farruco, un niño de raza caló, con tan mala bajandí que le abrí una brecha. La familia del gitano, al completo, se presentó en mi casa con el niño sangrando. Menuda bronca me llevé. Hoy en día tengo amistad con él y soy su doctora de cabecera. Entiendo muy bien el deje y las expresiones del hablar gitano incluso he incorporado en mi vocabulario palabras suyas, aunque su ingenuidad muchas veces me sorprende. Farruco vino a la consulta porque sentía chungos los gitanales — los genitales, le rectifiqué — pero cuando lo entendí, le di la razón, y es q...

Aldeana ingrata. Plagio de un chiste

La  SERIE PLAGIO DE UN CHISTE  en este blog es una  sección dedicada a  microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Ejido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste Cuando cursé estudios de psicología, por los años 80 del siglo pasado, nos definían que los que tienen complejo de inferioridad, son capaces de perpetrar actos violentos; son gente frustrada consigo misma que, intentando apaciguar su auto-desprecio, agreden a personas vulnerables. Leyendo a Rojas Marcos, nos da una visión moderna del tema y nos dice que la evidencia científica, en los últimos años, define que la propensión al despotismo, al crimen o a la violencia cruel es una característica bastante común de individuos narcisistas con un alto nivel de autoestima, de ahí la importancia de distinguir la autoestima saludable o constructiva y la alta autoest...

El escritor en navidad Plagio de un chiste

La  SERIE PLAGIO DE UN CHISTE  en este blog es una  sección dedicada a  microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Ejido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste _ ¿Qué haces amigo? _ Escribo. En la vejez es mi ejercicio diario. _ Pues anda, léeme algo _ Está bien. Escucha Navidad y Año nuevo Navidad que empiezas con el misterio que capta mi sutil razón. Aparta el roce de tu aspereza. Si tu amargura me rapta y con mis pasos tropiezas, sabré sentir la grandeza que mi corazón adapta. Año nuevo que empiezas con andariego camino, en un azar clandestino de incógnitas y extrañezas. Cuando se gire mi sino enmascarando certezas, iré moviendo las piezas de tu reto sibilino. _ Me gusta amigo. Léeme otra cosa. _ Te leeré un poema poema dedicado. _ Seguro que será intenso. _ Bien. Escucha Tu perfume Si mis ojos dejaran de ver...

Dejar de fumar. Plagio de un chiste

La  SERIE PLAGIO DE UN CHISTE  en este blog es una  sección dedicada a  microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Ejido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste Si dejar de fumar fuera fácil, muchos de los que fuman abandonarían el hábito. Pero es complicado s Yo fumo a todas horas y desde muy joven. Cuando miramos fotos con mi mujer, recordando tiempos pasados, no hay ni una que no salga sosteniendo un cigarro. Hace unos dias creí que era momento de dejarlo. Tomé una decisión. Fui al especialista, me derivó a la enfermera, me dieron un tratamiento, y he disminuido mucho el número de cigarros por día. Mi mujer me dice que la casa huele mejor y mi aliento también, que da gusto abrir el armario sin que apeste a tabaco la ropa. Está contenta porque han disminuido las quemaduras de colilla en las sabanas, en la mesit...

El vulgo y su vulgaridad. Plagio de un chiste

La SERIE PLAGIO DE UN CHISTE en este blog es una  sección dedicada a  microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Ejido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste EL VULGO Y LA VULGARIDAD Tengo un marido zafio, al que aguanto por principios, desde hace años. Siempre ha sido un vulgar, pero sobretodo cuando bebe, que pierde el control. Es tan grosero que si le hablas de política, lo que otros piensan se lo pasa por el culo. Así de claro. Si le hablas de relaciones, esta es una puta, aquella una lesbiana, el otro un maricón, aquel un cornudo y este un sumiso de mierda. A todos se los pasa por el culo. Si una mujer tiene un hijo siendo soltera, este pobre niño, es para él un hijo de puta, y a los dos se los pasa por el culo. Que no se te ocurra estar deprimida que es un signo de debilidad intolerable, y se te pasará por d...

Aprender nuevas tendencias de escritura

Acabo de hacer un curso de microrrelatos con un profesor (Gines Cutillas) que cultiva en su creación escritural la realidad subconsciente, onírica, imaginaria e irracional, es decir, surrealista. Contrasta conmigo que me inclino hacia el realismo. Ha insistido en que cuide las palabras, los diálogos, los finales, y sobre que no caiga en el chiste. Qué va a ser de mi que tengo unos cuantos microrrelatos de la SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste Desde que en un concurso de microrrelatos de reconocimiento mundial, al que yo me presenté, un tipo ganó veinte mil dólares con un texto copiado de una chuscada, por rebeldía, inicié en mi blog una sección llamada: EL PLAGIO DEL CHISTE A partir de ahora aceptaré secuencias irracionales, como cuando Jacinta le pregunt...

La bicicleta. Plagio del chiste

A Julia le gusta mucho recorrer la ciudad en bicicleta. Es consciente de los peligros que ello comporta, por el denso trafico. Desplazarse con ella es sentir el aire en su cara, que es como sentir la libertad. En primavera pone la bici a punto, después del letargo invernal de frío y lluvia. Cuando era pequeña siempre le pedía a los Magos una bicicleta. Nunca llegó. El año que se emancipó, lo primero que hizo fue comprarse una. Se fue a vivir frente al mar y cada día disfrutaba de un paseo en bici, con la brisa besándole la cara. Era feliz. Precisamente, el día que fue a comprarla, lo hizo con su padre, así tuvo la ocasión de poder explicarle lo que siente una niña cuando tiene el deseo de un regalo, que año tras año, no llega. Frustración. Aumentada porque no pasó lo mismo con el hombrecito de la casa, su hermanísimo, que la tuvo nada más pedirla. Bien flamante. Por una serie de circunstancias, la última bici, la mejor, la eléctrica, descansa en el sótano de su casa. Lleva allí años....

Plagio del chiste de uno de tantos matrimonios

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste Ernest me ha confidenciado que sospecha que su mujer le es infiel. Que no le extrañaría nada que tuviera un amorío porque su actitud indiferente y apunta a que así sea. Llevan años de convivencia y sufren las consecuencias del desgaste que la rutina ejerce sobre ellos. A él también le pasa. Sabe que, como dice Sabina:  los hombres engañan más que las mujeres, pero ellas lo hacen mejor. Me explica que cuando suena el teléfono su mujer siempre se apresura a cogerlo. Que estando los dos en la cama, él, intentando conciliar el sueño, y ella, leyendo como siempre, hasta la madrugada, una noche hubo una llamada, como tantas, sospechosa, y me detalla la conversación: -¿Diga? -No. No. Se ha confundido. -Llame usted a la Comanda...

Plagio del chiste de la madre defensora

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste Hoy con mis hijos dedicaré el día a recorrer tiendas. Están llenas de gente, pero los comerciantes se quejan de que solo entran a mirar. Mis hijos no piden demasiado, son conocedores de las carencias por las que su padre y yo hemos pasado y han aprendido a conformarse con lo que tienen, que no es para quejarse. El mayor ha acabado la carrera. No tiene medios para emanciparse. Al entrar en el centro comercial nos encontramos con Justina, ¡qué horror! es la vecina más impertinente. __¡Hola Julia!, ¡hola Pedro!, ¿tan mayor y de compras con mamá? Si tuvieras trabajo como mis hijos, que están los tres colocados... __¿Qué dices Justina? pero si mi hijo en su nuevo trabajo se siente como pez en el agua. __ Ah, si y ¿Qué hace? __Nad...

Plagio del chiste de la buena persona

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste Recibí una educación rigurosa, tanto en casa como en el colegio. Propia de aquellos tiempos de los años 50. Basada en férreos valores: honradez, disciplina, puntualidad, prudencia, sacrificio, lealtad, respeto, amistad, etc. Cuando tenia 20 años, la escuela en la que estudié la carrera de la que he trabajado toda mi vida, también fue hermética y exigente. Lo he agradecido siempre, aunque por aquel entonces por mi juventud necesitaba rebelarme y de hecho me rebelé de muchas cuestiones a base de esfuerzo interno. No me arrepiento de nada, salvo en ocasiones, de haber sufrido más de lo necesario. Puede que, en el transcurso de la vida, alguien que haya estado a mi lado, se haya resentido con alguna "menos buena" actit...

Plagio del chiste de la cuestión del tuteo

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste A mi me enseñaron que, a quien acabamos de conocer o a las personas mayores, por respeto se les debería de hablar de usted. Y esa práctica se ha perdido. Lo vivo cada día con mi madre. Me sigue pareciendo importante tenerlo en cuenta. Las cosas no son lo mismo El jefe me encargó que averiguara a dónde iba Ernesto cada mañana, con tanta prisa al salir de la oficina a la hora del desayuno. Le extrañaba después no verlo en el despacho, ni en los pasillos, ni tomando café en los bares colindantes. Tras bastantes días de pesquisas conseguí la información. — Pues mire, Sr. Luis, aprovecha para ir a su casa y hace el amor con su mujer. – ¡Ah bueno! eso está bien. Hacer el amor es siempre atractivo e irrefrenable, además de una sa...

Plagio del chiste de cumpleaños

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste. Ring, ring, ring…. — ¿Dígame? — Hola Pedro, felicidades, amigo. — Oh gracias Anna, precisamente ahora te iba a llamar para invitarte a la fiesta de esta noche. No puedes faltar. — Qué bien Pedro, pero… no tengo coche y…. — Anna, sabes que vivo a dos pasos de Matadepera y de regreso no te preocupes que te acompañaremos a casa. — Bueno, entonces si, vendré gustosa. — Solo una cosa, Anna, cuando llegues al portal llama al interfono con el codo del brazo derecho, empuja la puerta con el pie izquierdo, y ciérrala con la espalda. Para llamar al ascensor llama con el codo izquierdo, empuja la puerta con el pie y cierra con la espalda. — Pero…Pedro, perdona, ¿ por qué tengo que usar los codos, los pies y la espalda? — Anna, mujer, ...

Plagio del chiste de la dejada

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste. Mi madre siempre me reprende con la misma frase: ¡eres una dejada! ¡eres una dejada! y ella es una pesada. Que si haz la cama, que si ventila la habitación, que si deja las cosas recogidas, que si lleva la ropa sucia al lavadero, que si ordena tu armario, organiza tus cajones. Me va detrás fiscalizando lo que hago y lo que dejo de hacer. Hoy ha venido Ernesto, el vecino del 5º y hemos estado jugando toda la tarde. ¡Qué bien me lo he pasado! Le he explicado a mi madre lo que hemos hecho y no entiendo porque se ha escandalizado de esa manera. _ Al final te voy a dar la razón, mamá. Soy una dejada. _ A ver cuéntame hija ¿Cómo ha sido eso que has hecho con Ernesto? _ Verás mamá, el se insinuó y yo me fui dejando, me fui dejando...

Plagio del chiste del fanfarrón. Menudo chasco.

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste. Por las tardes ayudo a mi marido en su despacho. Siempre que entro una visita, le dice que espere, y al instante coge el teléfono y se pone a hablar : _ Señor Francino, no estoy dispuesto a aceptar por la gestión menos de un millón, así que no se moleste en llamar, salvo que esté de acuerdo con el precio de mi minuta. ¿Entendido? Hoy no he parado de hacerle gestos y señas, disimuladamente. Al colgar, saluda al hombre que espera frente a su mesa. _ Buenas tardes, ¿en qué puedo ayudarle? _ Verá, soy de la Compañía Telefónica y vengo a conectarle la línea. ¡Ay! Mi marido a veces se pasa con sus estrategias para hacerse valer. ******************************************* VOLVER AL INICIO DEL BLOG 

Plagio del chiste del polvo del abuelo.

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste. Mi abuelo tiene 95 años. Siempre ha sido un seductor porque según dice, las mujeres le gustan tanto que le dan vida. Se da todos los caprichos que quiere, en ese y en otros aspectos. Todas las tardes se reúne para jugar a cartas con dos viejos amigos, algo más jóvenes que él. Está sentado en su sofá orejero muy pensativo. _ ¿Qué te pasa abuelo? Me cansa la constante queja de mis amigos. Uno, que si la artrosis de las rodillas le impiden andar deprisa, el otro, que si la tos no le deja dormir por las noches, pero hace sesenta años que fuma y no piensa dejarlo. _Y a ti ¿qué te preocupa? _Mira Jose, le acabo de decir a Hortensia que si quería echar un polvete conmigo y me ha contestado ¡señorito, si acabamos de hacer uno! Y es...

Plagio del chiste del pene que habla

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste. Ernesto es un muchacho que se cuida mucho. Se hace periódicamente chequeos médicos, controla su presión, su peso, no fuma, sigue hábitos alimentarios saludables. Practica ejercicio físico al aire libre y en el gimnasio con las máquinas ha desarrollado un cuerpo musculoso. El problema que tiene es que no duerme bien. Sufre pesadillas nocturnas, levantándose sudoroso y sobresaltado. Y siempre con erecciones mañaneras. Hoy ha soñado que su pene hablaba. Pero se ha quedado profundamente preocupado cuando ha oído que tenía voz de pito. ******************************************* VOLVER AL INICIO DEL BLOG 

Plagio del chiste de las pestañas

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste. Veo tu foto que cubre mi pantalla y tu mirada engalana mi deseo. Mientras te contemplo sobrevienen pensamientos. Tú, artífice de mis sueños, a veces con besos olvidados en el enjambre del mundo de la inmediatez. Instantes que se pierden como te pierdo en un clic, si no retengo con amor el día a día. Te escapas sin remedio apesadumbrando segundos que se precipitan en el vacío. Mientras escribo tranquila estas líneas, la emoción me embarga. Cierro los ojos conteniendo una lágrima que se escapa por el borde de mi mejilla, en el instante que mi hija entra en el estudio. _ Mamá, ¿Qué haces frente al ordenador con los ojos cerrados? _ Nada, hija, es que Windows me ha dicho que cierre las pestañas. ****************************...

Plagio del chiste de los calzoncillos

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste. Me cansa verlo tan gordo con esa barriga cervecera. En su cabeza ya no le queda ni un pelo y luce un cuero cabelludo brillante, pero de la grasa que rezuma su piel ensucia mucho la funda de las almohadas. Cuando está en casa come y duerme, come y duerme, come y duerme y si bebe ya estoy perdida, porque se vuelve tan pesado, con tanta palabrería, que no se aguanta. Si se tira al suelo, allí se queda a dormir la mona porque no hay quien pueda con él para levantarlo. Entre el tipo que se le ha puesto y el mal carácter que tiene, que parece que esté amargado (tanto como me tiene a mi),  ha perdido todo el atractivo. Me dijo mi madre: “búscalo delgado y limpio que sucio y gordo se te volverá”. Tenía razón. Los domingos a la ...

Plagio del chiste de la enzima. La química del amor

SERIE PLAGIO DE UN CHISTE Son microrrelatos creados en protesta por el Concurso Internacional de Microrrelatos del Museo de la Palabra, de la Fundación César Egido Serrano, que concedió el Iº premio a un relato que no era inédito y además era el plagio de un chiste. Juan siempre está de broma. Amable y dispuesto a echarte una mano si lo precisas. Es un vecino muy resolutivo ante los problemas de nuestra comunidad. Me gusta porque a su lado una se sonríe y para mi eso tiene un valor añadido, más hoy en día, con la seriedad que gasta la gente, que pasa por tu lado y ni te saluda. Si has de conversar de temas serios, emplea su encanto personal, mostrando la cara mas amable. Está jubilado. Sus hijos se emanciparon y su mujer murió de cáncer siendo joven. Desde entonces no se le ha visto con pareja alguna. Hace unos días me confesó que después de tantos años ha encontrado una mujer que le gusta, pero no acaba de decidirse. Hoy al salir de la consulta, en el ambulatorio donde hemos coincidid...