El monasterio se construyó en el siglo X y fue historiografiado y restaurado a principios del siglo XX por el arquitecto Josep Puig i Cadafalc
La antigua abadía benedictina de Sant Benet de Bages fue fundada hacia el año 960, a iniciativa de los esposos Sal·la y Ricarda, que la dotaron económicamente. El mismo fundador obtuvo en un viaje a Roma la tutela papal, a la vez que trajo las reliquias de san Valentín, ya venerado en la zona. El primer abad fue Abbó, documentado desde el 967.
La iglesia fue consagrada el 972 con la asistencia del obispos de Vic, Urgell y Barcelona, además de miembros de la familia de los fundadores, que entonces ya habían fallecido. En esta ocasión se vuelve a mencionar su dependencia de Roma.
En el año 999 el establecimiento sufrió el ataque de las tropas de Almanzor. Después de unos años sin abad, el 1002 se eligió a Ramió 1002-1032, escogido por los monjes y sin la intervención de la familia de los fundadores que hasta ese momento habían determinado que los dirigentes de la comunidad tenían que ser familiares suyos. En 1016 una bula del papa Benito VIII puso el monasterio bajo su jurisdicción directa.
El 1075, a la muerte del abad Miró, hermano de Ramon Berenguer I, la situación cambia y Sant Benet fue unido al monasterio de Sant Ponç de Tomeres (Erau, Languedoc-Rosselló). A finales del siglo XII se recobró la independencia, el abad Benet (1108-1152) fue escogido entre los miembros de la comunidad. En esta época (el 1114) el establecimiento sufre una nueva incursión islámica, los efectos de la cual serían muy graves y se vieron obligados a construir de nuevo la iglesia (la actual, acabada hacia el 1212). A continuación fue iniciada la construcción del claustro aprovechando elementos del anterior.
En el año 1348, durante la Peste Negra, la comunidad desapareció casi completamente. A mediados de del siglo XVI, las dependencias monásticas se encontraban muy deterioradas. El 1593 perdió su independencia y fue unido a Santa Maria de Montserrat, según una bula papal de Clemente VIII. Según ésta, Montserrat dejaba Sant Pau del Camp y obtenía la dirección de Sant Benet, más provechosa. Esta unión hizo que, como Montserrat, pasase a formar parte de la Congregación de Valladolid. Sant Benet albergó un colegio de las Artes y un centro de acogida de los monjes de edad avanzada.
La iglesia y claustro primitivos se tuvieron que rehacer a raíz del ataque sarraceno de 1114. Son las partes más antiguas. A levante del claustro tendría que situarse la sala capitular, ahora prácticamente desaparecida. Posteriormente se añadió un segundo piso a aquel claustro. En el siglo XIV se construyó una nueva estructura gótica utilizada como bodega. A poniente se levanta el palacio abacial, del siglo XVII.
La iglesia es de nave única, con crucero y tres ábsides. Conserva la cripta. Al oeste se abre un portal de medio punto, con arquivoltas sin decorar y tres capiteles en cada lado. Tiene una segunda puerta más sencilla que comunica con el claustro. Ante la iglesia se conservan los restos de lo que sería el panteón de los fundadores.
El monasterio tuvo actividad hasta el año 1835. Las propiedades serían subastadas y los edificios se utilizaron como viviendas por los trabajadores de una industria textil.
El año 1835 fue vendido a particulares. En 1908 lo compró la madre del pintor catalán Ramón Casas, que lo empezó a restaurar bajo la dirección de Josep Puig y Cadafalch. Esta restauración hizo desaparecer edificios y estancias de la parte este del claustro, debido a su estado de total ruina, entre los los cuales la antigua sala capitular.
Fuente de informacion:
Monasterios de Cataluña