DUDA EN EL MUNDO VIRTUAL
Escapaba de un mundo frío, distante, indiferente.
La verdad no había gustado o había hecho daño dejando actitudes temerosas en nuevos contactos y para establecer lazos cercanos; temían estar en boca ajena (eso está bien) y se expresaban con cautela para prevenir conflictos, después de la repercusiones tan nefastas que habían vivido.
Los entramados los tejían vía email, "inflandose la cabeza" los unos y las otras, como comadres de charlatanería y "Patios de Corrala".
No se puede defender lo que no se ama y no se puede amar lo que no se conoce.
Por eso en la red nunca irán muy lejos las relaciones, porque en la comunicación virtual, para quien ha vivido malas experiencias, siempre rondará la duda, y porque se crea una distancia que no compromete, que a la primera de cambio, se esfuma todo y se desvanece.
Ahora su rumbo se dirigía a nuevos horizontes, nuevas gentes, nuevos enlaces. Nadie frenaría su placer de comunicar, su necesidad de expresar pensamientos.
El azar en todo caso haría el resto y tal vez volverse a encontrar.
Sea como fuere nunca, después de aquel tiempo, sería lo mismo.
