ALLÁ DONDE EL CAMINO ACABA Re greso como cada tarde al pueblo de mis sombras por el sendero que bordea la colina, con la cartera a cuestas como cuando íbamos a la escuela, solo que ahora, en el cuero y en la piel se me han grabado estigmas. Mis pasos se deslizan con pies cansados sobre un tapiz que contigo me parecía hierba y sin ti, piedra. Avanzo tal como acontece. Mi caminar huérfano de algazara teme llegar a la última curva cuando veo asomar, tras el portón, las lilas silvestres que adornan tu minúscula parcela. TUS FLORES DE VEINTE PÉTALOS Otra versión presentada en Concurso de Zenda noviembre 2017 ******************* VOLVER AL INICIO DEL BLOG
Anna Jorba Ricart es Aurora Hildegarda. En el límite de la realidad y de la ficción. Tu espacio para descubrir autenticidad.