Desde muy joven supe que me gustaba conducir. Cuando empecé a trabajar lo primero que hice fue sacarme el carnet. Había aprobado la parte teórica y un día soleado de verano el monitor de la autoescuela me citó en las pistas de Montjuic para realizar las pruebas de practicas. Estaba segura de mi misma llevando el coche. Aprendí circulando por Barcelona y me preocupaba poco las pruebas de practicas, pero llegado el momento, me temblaban tanto las piernas que las rodillas me rozaban con el volante del seiscientos. Al iniciar las maniobras de aparcamiento se agolparon en la acera unos muchachos que no conocía de nada y empezaron a piropearme. Les miré pero no les hice ni caso. Aparqué el auto con las ruedas perfectamente alineadas. Respiré hondo para tranquilizarme. Pero cuál fue mi sorpresa cuando se acercó el examinador y asomando la cabeza por la ventanilla, bruscamente me dijo: " es lo último, que Ud. se traiga apuntadores al examen ". Rubricó enérgicamente los folios de mi...
Anna Jorba Ricart es Aurora Hildegarda. En el límite de la realidad y de la ficción. Tu espacio para descubrir autenticidad.