LA DEFENSA Oigo el ruido de la llave abriendo la cerradura y el miedo me paraliza. Vendrá con el mismo plan. Me obligará a sentarme en sus rodillas hasta que deslice sobre mí eso que tanto me repugna. Nunca me acostumbraré a sus amenazas, ni a sus gritos, ni haré como mamá, que por seguridad, se mantiene en silencio. Me siento como un perro privado de libertad, al que de tanto sufrir daño, casi se le hace normal elmaltrato, porque no conoce otra cosa. Sin embargo, en mi, no cabe el vencimiento. Y llegó la salvación con su defensa. Una abogada dispuesta, que ante mi denuncia penal, me ofreció asistencia jurídica y una impecable intervención letrada. Dispuso medidas cautelares y una orden de protección con absoluta privacidad. Y un día en que sin bozal destrocé su cínica sonrisa, vinieron a buscarle. Y empecé un camino nuevo, desde cero. Finalista en el Concurso de abogados del mes de enero E l más votado por la comunidad e incluido en el libro editado de la VIII edición En el Concu...
Anna Jorba Ricart es Aurora Hildegarda. En el límite de la realidad y de la ficción. Tu espacio para descubrir autenticidad.