Te dimos trabajo en casa de mi madre. Confiamos en ti. Eras vecina de escalera y nunca pensamos que fueras de esa calaña.
Cuando aquella mañana mi madre abrió el armario, como era tan ordenada, enseguida vio por el espacio vacío, que el monedero no estaba.
Eras la única persona que había entrado en su casa que no fuera yo. Se lo imaginó.
Me llamó por telefono y te llamó a ti también._sube que quiero hablar contigo.
A los pocos minutos frente a ella, y cara a cara te preguntó ¿por qué lo has cogido?
A los pocos minutos frente a ella, y cara a cara te preguntó ¿por qué lo has cogido?
Te arrodillaste y llorando tu respuesta fue pedir perdón y decir que había sido un mal momento y que no lo harías más.
Mi madre tenia 90 años y con mas inteligencia que tú. Te despidió porque no merecías su confianza. Encontramos a faltar bastantes más cosas en la casa.
Ahora pasas por mi lado y me giras la cara. Te recuerdo que tú eres la ladrona y una sinvergüenza. Estupida vecina.
Era metódica y ordenada. Al abrir el armario observó el espacio vacío del billetero. Solo una persona había entrado en su casa, para hacer las labores de limpieza, la vecina. Sin dudarlo la llamó, la hizo subir y a bocajarro se lo dijo.
_ Perdóneme señora, fue un mal momento.
_ No vuelvas más
Hay gente mal nacida que te limpia la casa muy a fondo.
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